lunes, 25 de octubre de 2010

SOBRE LA SUPUESTA AUSTERIDAD DE LOS PRESUPUESTOS DE LA XUNTA DE GALICIA

Se presume de presupuestos austeros y, con cierto regodeo, se anuncian recortes en los gastos sociales por parte de la Xunta de Galicia. Y digo que se presume porque se pregona y difunde el hecho como un mérito del Gobierno Gallego y de su Presidente, fruto de su supuesto rigor en el gasto en tiempos de crisis, a la par que como causa principal de estas medidas se señala al pérfido Gobierno de España actualmente en el poder.
Claro que mientras esto sucede llegan a nosotros informaciones preocupantes. Por ejemplo:

1) Mientras la Unión Europea y el Gobierno de España, retiran la recomendación de ayudas, y las propias ayudas al sector del automovil, señalando incluso que las llevadas a cabo en el 2009 y primer semestre de 2010, encarecieron indebidamente el costo de los automóviles, incrementaron indebidamente los beneficios de los fabricantes, y no ayudaron a resolver los problemas del sector, aquí en Galicia y a contracorriente de todos, la Xunta anuncia por su cuenta ayudas al sector por importe de 120 millones de euros, de los que 100 irán a parar a Citroen y a su red de proveedores. Dicen que ¡para compensar la subida del IVA! Pero, obviamente no puedo dejar de preguntarme si esto no tendrá algo que ver con el hecho de que el Presidente Feijoo, estando en la oposición recibió gratis durante varios años coches Citroen de alta gama para su uso personal o el de su partido. Otra cosa no puede explicarse para justificar una medida como esta, solo regional y por lo tanto inútil en un mercado tan abierto e internacionalizado como el del automovil.
2) Mientras se han reducido los sueldos de los empleados públicos, sigue vigente y sin siquiera rebajar su cuantía, aquél famoso “plus de altos cargos de la Xunta” consistente en 15.000 euros al año para el total de los 2000 altos cargos que desempeñaron sus funciones ¡desde 1981! es decir en los últimos 29 años. El privilegio alcanza a directores generales, subdirectores, delegados provinciales, secretarios de delegación, secretarios generales, personal de fundaciones, alto personal de consorcios administrativos,, directores gerentes, directores de gabinetes, personal de las oficinas en el exterior, Casa de Galicia en Madrid, directores de organismos autónomos, entidades de carácter público, TVG y Real Academia Galega (RAG), etc. Son nada menos que 30 millones de euros anuales para este plus vitalicio equivalente a dos millones y medio al año de las antiguas pesetas, candidad que supera el sueldo anual de muchos trabajadores y trabajadoras a jornada completa.
3) Mientras se anuncia la progresiva privatización de la sanidad pública gallega, se anuncia una inversión de 7 millones de euros en REGANOSA, se dice que para mantener “la galleguidad” de la empresa y evitar así que un “inversor extranjero” se pueda hacer con la misma. Por lo visto, el inversor que nadie conoce es nada menos que ¡australiano! Mientras esto ocurre, resulta que se retira de la empresa el capital privado gallego de entidades como Caixanova, Caixa Galicia, Banco Pastor y la propia ENDESA. ¿Defensa de la galleguidad o favor al grupo Tojeiro? Parece que contra viento y marea privatizamos la sanidad, lo que nadie desea, y gastamos el dinero público en salvar negocios privados de dudosa viabilidad, que nadie ha pedido, salvo sus propietarios.

Lo expuesto pone de manifiesto cuan relativo resulta para el actual Gobierno de la Xunta lo que dice sobre “el mercado”, “lo público” o “lo privado”. Más bien parece que lo uno o lo otro está en función de quienes sean en cada caso los amigos de los unos o de los otros. No es nada nuevo, sinó otra faceta mas de la “política clientelar” que sí parece la verdadera pauta de conducta de la Xunta de Galicia. Pregunta: ¿a cambio de nada? Evidentemente no. En realidad se trata siempre de negocio, la política como negocio.
Un sencillo cálculo de los gastos anteriores correspondientes a estos ejemplos recogidos de la prensa gallega nos aporta las siguietes cifras: Citroen y sector del automóvil 120 millones de euros; Plus de altos cargos, 30 millones, Reganosa 7 millones. Total 157 millones de euros, es decir 29.500 millones de las antiguas pesetas. ¿Austeridad para quien? ¿Quién paga la crisis?

SUSO MOSQUERA

1 comentario:

MONCHO dijo...

Se olvida usted del dinero publico destinado a pagar la visita del Papa. Según los medios de comunicación serán 4 milloncejos de euros mas los que pague la Xunta de Galicia, por unas pocas horas de estancia del Papa. Como si la Iglesia Católica fuese pobre y además no cobrase ya del Estado substanciosas tajadas económicas por otras vías. Aparte está lo que paga también para este viaje el gobierno central y algunos empresarios, que por lo visto no tienen dinero para subir los sueldos de sus empleados pero si para donarselo al Papa. Despues de lo ocurrido en Valencia ¿Cuanto, como, quien y en qué se gasta tantisimo dinero? ¿O es que para esto y para estos no hay crisis?