martes, 27 de agosto de 2013

Estados Unidos en Siria

Parece que para el presidente Obama ha pesado más el fin que los medios. No pongo en duda que haya objetivos humanitarios en la pretendida intervención en Siria por parte de una serie de paises, a la cabeza de los cuales se encuentra Estados Unidos. Tampoco tengo dudas de que en la decisión pesan intereses estratégicos, pues oriente próximo no es zona que interese abandonar a ninguna de las potencias: ni Rusia, ni Estados Unidos ni -ya como potencia regional- Irán.

Pero lo malo de poner por delante los fines a los medios es que el legado que se deje en Siria sea algo parecido a lo que se ha dejado en Irak: un país empobrecido, roto, repleto de violencia y muerte. Por si esto fuese poco la ONU (su Consejo de Seguridad) no ampara la intervención por la sencilla razón de que no están dispuestas a ello Rusia ni China, entre otros países. Si cada país o grupo de ellos puede tomar la iniciativa para intervenir en un conflicto, por odioso y criminal que sea el mismo, entonces estamos admitiendo la ley de la selva, sin derecho internacional alguno. Que la ONU tiene serias carencias democráticas es evidente, pero hoy por hoy es el organismo internacional donde se discuten asuntos como el de Siria y no hay acuerdo -por desgracia- para intervenir y ayudar a la población civil resueltamente parando la barbarie de las autoridades y -dicho sea de paso- de algunos sectores de la oposición.

¿Que dirá la opinión púbica de izquierdas en Francia si el presidente Hollande decide secundar a Estados Unidos? ¿en que términos lo hará? Porque está claro que Reino Unido -cuya política exterior es la de Estados Unidos- Corea del Sur, México y Japón son, a estos y otros efectos, meros comparsas de la potencia americana. Hay otros países que por sus compromisos con Estados Unidos se verán obligados a intervenir de una u otra manera. ¿Y España? Al alocado gobierno español no le quedará otro remedio que permitir el uso de bases para la intervención, a no ser que España estuviese gobernada por personas que pusiesen el derecho por encima de cualquier otra consideración.

No ignoro que mientras escribo estas palabras están sufriendo y muriendo en Siria -no es el único país- muchas personas y que el conflicto habrá que pararlo. Pero una cosa es desear que esto ocurra y otra aceptar que se haga sin respeto al derecho. Estados Unidos está obligado a llegar a acuerdos en el Consejo de Seguridad de la ONU con Rusia y China antes de cualquier intervención, pero creo que no lo hará. La política es más complicada que una bravuconada con aviones y barcos asolando el este del Mediterráneo. La política es mucho más complicada que seguir la estela del alocado gobierno de Israel, principal interesado en la intervención militar en Siria. Y si luego los alocados ayatolás iraníes incurren en monstruosidades estaremos en un escenario peor.
L. de Guereñu Polán.

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