Iban a ser las diez, y
vi como Daniel bajaba del autobús y se acercaba al grupo que cercano a la
puerta del cementerio civil de A Coruña esperábamos para entrar a realizar la
ofrenda floral que cada 1º de Mayo los sindicatos UGT y CC.OO. llevan a cabo en
memoria de los muertos en la lucha por la libertad y la democracia. Alto y
erguido a sus más de 90 años, apoyado en su bastón, lo encontré muy bien,
lúcido y firme a pesar de su edad.
Daniel pertenecía a las
Juventudes Socialistas Unificadas cuando en Julio de 1936 se produjo la
sublevación de Franco y estalló la Guerra Civil. Terminada la guerra, siendo
muy joven, colaboró con la guerrilla allá por la comarca de Ferrol en uno de
cuyos municipios (no recuerdo si en Fene o Narón) había nacido. Pasó varios
años en la cárcel de A Coruña antes de irse a trabajar por diversos lugares de
España. Hoy, jubilado desde hace muchos años, está afiliado a la Agrupación
Socialista Coruñesa del PSOE.
Caminamos juntos hasta
la placa y pequeño monumento que a la entrada del cementerio recuerda a todos
los muertos en la lucha por la libertad y la democracia. Tras el saludo y la
consabida pregunta de ¿qué tal Daniel? me dice que “otro año mas aquí”, “vengo
todos los primeros de mayo que puedo, a recordar y a compartir los recuerdos”,
“aquí están enterrados cinco compañeros con los que compartí muchos años de
cárcel, por cierto muy cerca de aquí, en la vieja cárcel coruñesa”. Le comento
que este es un primero de mayo especial porque es año electoral y pueden cambiar
las cosas. Lo ve difícil. Me dice que “sin unidad no tenemos nada que hacer” y
que “con las divisiones y enfrentamientos internos no vamos a ningún sitio” y
me recuerda la experiencia del Frente Popular como un referente en el que
debiera inspirarse la izquierda hoy.
Se por experiencia que
los hombres como Daniel ven las cosas con una claridad que a otros nos falta.
También sé que se les escucha poco, o nada. Además de ser ellos mismos historia
viva, ven la realidad desde la altura de los años y la sabiduría que aporta su
experiencia de la vida. Pero por desgracia, a ellos y a la propia historia, no
solo los ignoramos cuando en realidad mas falta nos hacen, sino que muchos
incluso proponen directamente el olvido.
Al acto asistieron las
mismas personas que solemos hacerlo también otros años. Eché en falta a José,
muy mayor y enfermo, y también a José Manuel, fallecido. Pero también había
jóvenes y gente nueva. En total mas de cincuenta y menos de cien. Me alegré de
ver otro año mas a Gabi, un activo sindicalista de la UGT cercano a los 40
años, persona sensible e indignada ante la actual situación, simpatizante y firme
defensor de Podemos. Me dijo que debía de bajar de peso, y tiene razón. Lo
observe preocupado, y me pregunto si sería por las declaraciones y la dimisión
de Monedero de las que hablaban ayer todos los medios con destacados titulares.
En el acto no participó ninguno de los candidatos que, bajo las diversas siglas
de los partidos y formaciones políticas, aspiran a ser elegidos concejales en las
elecciones municipales del próximo día 24.
Al finalizar nos vamos
todos menos Daniel. El se queda a visitar una a una las cinco tumbas que acogen
los restos de sus compañeros de ideales, ilusiones, luchas, y cárcel, para compartir con ellos sus recuerdos y el
1º de Mayo.
Xesús Mosquera Sueiro /
2 de Mayo de 2015
1 comentario:
Guereñu dijo: honor a Daniel y los suyos.
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