En
2011, a raíz de elecciones que impulsaban populismos varios, más
que conservadores retrógrados, un pensador italiano lanzo el libro
en que sostenía: “hoy el mundo es de derechas”
El
devenir de Italia en la época Berlusconi apuntaba al renacimiento
de lo que, en otros países europeos, como Polonia y Hungría, ya
era idea base de sus gobiernos, incluso descaradas
practicas
dirigidas a desmantelar el estado de derecho, acompañadas de
discursos “tan virtuosos” para sus votantes como autoritarios,
xenófobos e insolidarios, inspiró
al crítico social italiano Raffaele Simone a lanzar una tesis en que
intentaba buscar explicación a lo que ocurría, en resumen los
ciudadanos más libres del mundo, los europeos, abandonaban a las
fuerzas de izquierdas, incluso a las más moderadas socialdemócratas,
y dejaban su futuro en manos de las derechas, en algún caso de las
mas ultramontanas.
El
titulo del libro en que recogía sus tesis es “EL MONSTRUO AMABLE”
y
el subtitulo “¿El
mundo se vuelve de derechas?”, y
comienza por retratar no a los políticos sino a los votantes, tiene
claro que
los
nuevos valores de los ciudadanos europeos son el consumismo y el
individualismo, y
que su
ambiente
cultural está
volcado
al un
puro
y egoísta
entretenimiento.
Tomando
como referencia a Ortega y Gasset sostiene "...
estamos ante una nueva forma metamórfica de la modernidad de masas,
ante un gran salto adelante. Se trata de la llegada del Monstruo
Amable….”,
que identifica con la neoderecha, que persiguiendo lo mismo que las
derechas más radicales “sabe
que si usase la mano dura todo el mundo lo sabría y podrían
derivarse efectos negativos ”.
Mientras
que la izquierda ha
hecho valer sus ideales, posiblemente gracias a la existencia de una
alternativa al capitalismo en los países autodenominados
socialistas,la derecha ha ejercido
su opresión de manera casi imperceptible sin
coerción clara, sino
seduciendo
a
la masa promoviendo
la diversión, el confort y concediendo
margen al bienestar que las
políticas de los
gobiernos socialdemócratas promueven, incluso
cuando es ella la que gobierna, pero
la
combinación del naufragio del comunismo con el
desprestigio que significó para la izquierda, los
efectos culturales del capitalismo globalizado (
nos encontramos no ante una tormenta política sino cultural) y la
escala también global de fenómenos como
el migratorio están permitiendo que surjan en un país tras otro
fuerzas neo sin complejos.
Además
de los gobiernos
ultranacionalistas
conservadores,
dudosamente
democráticos,
de Polonia, Hungría, en la Italia de Simone hoy
el
actual gobierno acoge neofascistas declarados, el Alemania los
neonazis consiguen escaños y en España los neofranquistas
condicionan
gobiernos.Sin
embargo lo más grave no es que
esas fuerzas estén saliendo a la luz pública, mucho más grave es
que las derechas teóricamente moderadas, y al menos democráticas
confesas , desplazan sus propuestas electorales y programáticas al
mismo terreno que sus competidoras ultras. Claro
que también puede ser que muchos de sus militantes, una vez superado
el complejo, simplemente se quitan la careta.
Abril
de 2019
Isidoro
Gracia
1 comentario:
Acertada reflexión.
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