sábado, 17 de abril de 2010

MEMORIA HISTÓRICA ERRORES Y EXCESOS

Es justo, necesario y conveniente que los desaparecidos de la guerra, y sobre todo los de la postguerra, aparezcan, que aquellos que descansan en las cunetas y en fosas anónimas sean enterrados decorosamente por sus allegados, que así descansaran.
Pero atención, si todo aquello que guarda memoria de lo que pasó, estatuas, expedientes, nombres, etc., se retira, se destruye o simplemente se oculta, la posibilidad de que viejos errores se vuelvan a producir aumenta.
Si se intenta que las actuales y nuevas generaciones ignoren que hubo una guerra, perdida por los que defendían la legalidad, o, que los jóvenes presentes y futuros, crean que quien la ganó no existió y que tuvo un apoyo sociológico mayoritario del pueblo español, durante un largo periodo de tiempo, se cae en errores similares a aquellos que intentaron manipular la historia, convirtiendo a los defensores de la República y de la legalidad en los ilegales y delincuentes.
Es conveniente y digno de elogio que los ciudadanos se manifiesten contra lo que a todas luces es una caza de brujas contra un juez, y no solo contra un juez, sino contra la policía, fiscales y dirigentes políticos que combaten la corrupción, incluso conveniente es que quien los conoce bien, como el antiguo fiscal anticorrupción, ponga de manifiesto el pasado de algunos jueces del Tribunal Supremo, así además se recuperará parte de la memoria próxima, respecto al papel que algunos jueces españoles están jugando en el actual periodo democrático, y no solo son los del Supremo, en otros niveles existen jueces para los que las Leyes democráticas son interpretadas contra el sentir mayoritario que las impulsó, torciendo letra y espíritu alejando sus autos y resoluciones de la lógica de ciudadano, hasta límites inaceptables.
Pero si se aprovechan esos legítimos y democráticos actos para otros fines, como ignorar que algunos de los actuales símbolos (la bandera por ejemplo) los son de todos los españoles, por decisión absolutamente democrática, o se cae en el exceso del insulto generalizado, que no la calificación, a organismos, entidades y organizaciones, se perjudica objetivamente a las personas, entidades e ideas a quien se pretende defender.
Abril de 2010
Fdo: Isidoro Gracia (DNI 7752400C)

3 comentarios:

LOIS DO DEZA dijo...

¿EXCESOS?
En materia de memoria histórica, falar de excesos por parte dos que queren recuperala, coido que é difícil. Os problemas son mais ben de signo contrario: moitos retrasos, insuficiencias, medo aínda despois de transcorridos 35 anos da morte do ditador. E sobre todo, grandes e potentes esforzos de algúns para que non se faga.
A retirada dos símbolos franquistas de rúas prazas e organismos oficiais, é unha necesidade urxente que debera terse feito fai xa moitos anos. Os nomes destas rúas e prazas, as estatuas, as placas conmemorativas, etc., non se puxeron “para que os feitos non se volvan a repetir”, senón para todo o contrario: Enaltecer as súas figuras e o réxime político o que serviron, pretendendo deixar para a posterioridade un símbolo de todo elo. ¿Sería razoable dedicar nomes de rúas os asasinos e ladróns para que non esquezamos os seus crimes e así non volver a cometelos? ¿Ou que lle poñamos os seus nomes a un Colexio o a un Hospital? Sería un absurdo.
Unha das primeiras cousas que fixo Enrique Tierno Galván en Madrid tras ser elixido alcalde, foi cambiar o nome da grande avenida de “José Antonio Primo de Rivera” polo de “Gran Vía” que ten hoxe. ¿Alguén se imaxina que esta importante rúa madrileña seguira hoxe co nome do fundador da falange? ¿Alguén se imaxina que o nome de Adolf Hitler se mantivese nas principais rúas das cidades alamanas?
Por desgraza sabemos máis, moitísimo máis, dos crimes do nazismo en Alemania e en Europa, que do que ocorrido de verdade co franquismo en España sobre todo entre os anos 1936 e 1950. E máis, o que se que se quere e se pretende por parte de algúns e que a desinformación permaneza para a grande maioría, e que entre os que saben, aquilo se esqueza. Por iso van a polo xuíz Garzón.
¿Como esquecer que aínda agora, despois de tantos anos segan sen aparecer máis de 100 mil cadáveres, que se ocultaron seguindo instrucións dos mandos militares e políticos da época? ¿Quén quere impedir que se saiba a verdade e por qué? Estas preguntas están aí, levan aí moitos anos. E deberán ter resposta. Os que pensan que se esquecerán coido que están moi equivocados.

LOIS DO DEZA
19/04/2010

FUNDACIÓN LUÍS TILVE dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Isidoro dijo...

Decia Aristóteles que la virtud está en el justo témino medio.
Efectivamente no es razonable que , en democracia, la principal calle de una ciudad lleve el nombre de quien defendía la "dialectica de los puños y las pistolas", es una barbaridad que en la plaza de un ayuntamiento importante quede la estatua de alguien con vocación de asesino.
Pero atención, un escudo con el aguila bicéfala o una cruz gigantesca, nos pueden ayudar a recordar a futuras generaciones lo bárbaro de una guerra entre hermanos y vecinos, o los cuarenta años de aceptación social, mayorítaria en Galicia, con unos motivos lógicos y otros menos.
También que, de acuerdo con la lógica del ciudadano común, la defensa del juez, policía o político a quien queremos defender pasa por no perjudicar sus mayores intereses, por acciones desmedidas o inoportunas en el tiempo.

Isidoro