domingo, 25 de marzo de 2012

¿Para cuando leyes electorales justas?

Parece algo elemental: que el número de votos populares refleje exactamente el número de escaños en el Parlamento. Pues no; repetidamente se da el caso de que el partido o la candidatura más votada no es la que tiene más escaños. ¿Por que esto es así? Porque las leyes electorales que tenemos en España no son justas. Pueden haber valido para una etapa en la que había que fortalecer a los partidos políticos; puede que no se pueda discutir la legitimidad de las elecciones en una u otra ocasión, pero las leyes electorales en Esñaña, después de treinta y cinco años de democracia, no son justas.

Los socialistas han podido legislar en orden a una proporcionalidad entre los resultados y los escaños obtenidos por cada candidatura, pero no lo han hecho. También lo podrían haber hecho otros partidos políticos, pero no ha sido así. Tal situación, además de injusta, es absurda. ¿Cómo entender que en las tres provincias vascas, con una diferencia abismal de habitantes a favor de Vizcaya, el Parlamento autónomo se forme con 25 escaños de cada una de las tres? Ni tiene sentido ni es justo. Y lo que no es justo termina siendo perjudicial para la democracia. 

El número de votos obtenidos por cada partido en Andalucía y Asturias, hoy, no responde a los escaños repartidos. ¿Cuando los socialistas de Asturias, de Baleares, de Galicia, de Castilla, de Andalucía y del universo mundo se dejarán de hacer el paripé, de discutir sobre el sexo de los ángeles y harán leyes electorales justas? Solo así no se falsea un sistema electoral; solo así no se defrauda a los electores; y solo así se responde a la volutad popular. Lo contario es seguir haciendo el tonto y haciéndolo a fondo. 

La circunscripción única es la única justa, la única proporcional, y por lo tanto la única a reivindicar; pese a quien pese.

L. de Guereñu Polán.

No hay comentarios: