Una nota musical por sí sola, siempre suena
bien, pero en medio de una partitura, en el lugar inapropiado, puede
convertirse en el peor de los sonidos. Esta obviedad la ha tenido muy en cuenta
el Gobierno de la Xunta de Galicia y, especialmente, su Conselleira de
Traballo, Beatriz Mato, al sacar pecho alegando que el paro en Galicia está por
debajo de la media española. El dato, por sí solo, no suena mal; el problema
viene cuando se compara dentro de la propia comunidad y se comprueba que son
los peores índices de la historia (un 187% de crecimiento del paro en los
últimos años), y se analiza el porqué del mismo: teniendo en cuenta que en el
último año han abandonado Galicia 2.122 jóvenes de entre 20 y 34 años al mes
(70 al día), y que la tasa de envejecimiento de nuestra Comunidad Autónoma es
la segunda más elevada de España (736.567 pensionistas), que el paro estuviera
por encima de la media española sería el apocalipsis. Para acabar de dar la
nota, la Conselleira presume de su programa de empleo, pero se olvida de
mencionar la reducción de 93 a 45,9 los millones destinados a promoción del
empleo (50,6%), el recorte de 3.000 docentes en los últimos años y de unos
1.500 empleados públicos, sin contar los de sanidad, y los recortes e impuestos
varios que han mermado el poder adquisitivo hasta llevar al cierre a miles de
pequeños comerciantes, estridencia, esta última, que convierten al Gobierno de
la Xunta en un arma de destrucción masiva de empleo.
Guillerme Pérez
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