jueves, 20 de junio de 2013

Los ricos, más ricos

El año 2012 acabó en España con 144.600 personas que disponen de más de 740.000 euros, es decir, un 5,4% más que en el año 2011. Esto quiere decir que la riqueza se ha ido acumulando en unas pocas personas (144.000 son pocas en relación a 46 millones de habitantes) y por lo tanto las políticas de solidaridad o han estado ausentes o no han servido para nada, máxime cuando sabemos que miles de personas han perdido su casa por no poderla pagar, hay unos seis millones de personas en paro, una cantidad indeterminada de personas subempleadas, otra cantidad en la economía sumergia (por lo que no contribuye a las arcas del Estado) y muchos autónomos, profesionales, obreros, empleados, etc. han visto reducido su salario real. Los datos los he tomado del informe anual que realiza RBC Wealth Management Capgemini: "Riqueza en eL Mundo de 2013".

Si ningún español de aquellos 144.000 tuviese más de 740.000 euros (lo que no es así, pues aquella es la cantidad mínima de que disponen) acumularían unos activos de 107 mil millones de euros, un verdadero escándalo sobre todo si tenemos en cuenta que una parte de esa masa de capital no está en la economía productiva, sino en la especulativa: aprovechando una crisis para comprar barato y vender cuando se supera la crisis, especulando en bolsa, en actividades delictivas e ilícitas, etc.

Es mucho dinero 740.000 de capital, y también lo es 400.000 euros, por ejemplo. Ahí es donde está la gran posibilidad de un Estado justo para obtener recursos y sacar al país de una crisis que se ceba en la mayor parte de la población, pero para el caso de España, sobre todo, en unos diez millones de personas. ¿Como podría el Estado obtener recursos de esos patrimonios? Interviniendo los movimientos financieros que realizan, porque esos activos no permanecen quietos, están moviéndose en nuevos o antiguos negocios -insisto- no siempre lícitos. También gravando fiscalmente esos patrimonios de forma conveniente. Téngase en cuenta que el "rescate" que ha necesitado la banca española para hacer casi lo mismo que lo que venía haciendo (tomarle el pelo al país y enriquecer a unos pocos) ha sido de unos 40.000 millones de euros, bastante menos que el montante mínimo poseído por aquellos 144.600 individuos.

Ahora una apreciación personal que seguramente no será compartida por todos: desde mi punto de vista la mayoría de las fortunas se han hecho a base de trampas, delitos y acciones por el estilo. Solo los capitales obtenidos mediante golpes de suerte (loterías...) o el ahorro constante de un negociante avezado pueden considerarse lícitos. Si fuese cierta mi convicción y los grandes capitales fuesen el resultado de favores recibidos desde el poder político, de la explotación inmisericorde de miles de personas, etc. (tesis que no he inventado yo, claro) ¿como no ver lógica una intervención estatal decidida sobre aquellos capitales?
L. de Guereñu Polán.

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