martes, 19 de enero de 2021

EL DESACIERTO DEL SR. IGLESIAS TURRIÓN

Vaya por delante a fuer de sincero que sin despertar en mí un especial entusiasmo, tampoco genera a priori antipatía. Y sigo creyendo sin la menor duda que la fórmula de la que forma usted parte para gobernar este país y los postulados que la sostienen, es la mejor posible para sacar del peligroso atolladero en que se halla este país. Y que sería muy triste que se diera al traste poniendo en riesgo el fondo con las formas. 
 
Y justo es decir que pese a mi escaso entusiasmo por su persona, le reconozco su brillantez, su cultura, el ser excelente arquitecto de la palabra y buen orador. Hábil estratega, y con un discurso comprometido, aunque en ocasiones sus actos semejan comprometerlo. 
 
Como todo político que hace uso y abuso de la palabra en ocasiones tal liberalidad conduce a alguna imprudencia. Sinceramente en su última entrevista televisiva en una medio de gran audiencia, al menos en dos ocasiones cabalgó sobre el dislate en mi modesto criterio. 
 
Cuando le preguntan, “¿Considera realmente a Puigdemont un exiliado, como se exiliaron muchos republicanos durante la dictadura del franquismo?” “¿Los puede comparar?”, su respuesta es tajante y sin matices “Pues lo digo claramente, creo que sí”. 
 
El exilio republicano Sr. Iglesias Turrión, fue el drama de cientos de miles de compatriotas arrojados de su país por el terror al franquismo y a su represión criminal tras tres años de lucha encarnizada defiendo la Libertad y la Republica que la encarnaba. 
 
A los exiliados republicanos les esperaba la miseria, el dolor, el hambre. La angustia de la persecución de la policía franquista conchaba con la nazi y la del colaboracionista Pétain…eso en territorio francés… En muchos casos la muerte y el olvido lejos de la patria. Valgan por vía de ejemplo las tumbas de D. Antonio Machado y de D. Manuel Azaña…Y valga también, la entrega al general Franco por los agentes nazis y de Vichy del Honorable President de la Generalitat D. Lluis Companys, asesinado tras una farsa de Corte Militar. 
 
Es muy difícil procesar las razones que pueden animar a alguien como el Sr. Iglesias Turrión de cuya inteligencia no cabe dudar, a asimilar a los cientos de miles de ciudadanos y ciudadanos obligados a expatriarse ante el franquismo y sus aliados nazis y fascistas triunfantes en la contienda, con una persona que elude en una fuga digna de ser investigada en orden al curioso desinterés del gobierno popular en apresar a alguien que de ser aprehendido sería muy incómodo. 
 
Contrasta llamativamente tal comportamiento con la coherencia de otros compañeros y compañeras suyos que como él, tras haber violentado la legalidad democrática en un Estado de Derecho internacionalmente reconocido, generando con ello una grave quiebra en la convivencia ciudadana, asumieron con gallardía su responsabilidad sin declinar un ápice sus convicciones. 
 
Un caballero el Sr. Puigdemont, que pasará a alojarse a “mesa y mantel” en un palacete nada despreciable en Waterloo, teniendo escolta en ocasiones no ajena a miembros de la fuerza pública de la Genaralitat, un tren de vida no enteramente explicado y pudiendo expresarse sin la menor restricción en los medios públicos catalanes y españoles, siendo finalmente elegido en unas elecciones a las que pudo presentarse con absoluta garantía para la Eurocámara… 
 
Con humildad tengo la convicción de que es un grave desacierto del Sr. Iglesias Turrión humillar al exilio republicano, equiparándolo al tal Puigdemont. Esa masa de héroes y mártires silenciados por la historia, algunos muertos en los campos de exterminio nazis contando con el especial empeño en ello del canalla de Serrano Suñer. Otros participando con valentía en la liberación de Paris. Muchos, rehaciendo sus vidas lejos de donde nacieron atenazado su corazón por la melancolía. Honor y Gloria a todos ellos. Cabe esperar del Sr. Iglesias Turrión se desdiga rotundamente de sus afirmación.
 
Otro disparate, quizás atribuible a sumarse con frivolidad al barrullo de trazo grueso de la política que padecemos, es calificar de monárquico, al PSOE. Es ofender inicuamente y con indecencia a cientos de miles de socialistas que desde el 2 de mayo de 1879 en que lo funda D. PABLO IGLESIAS POSSE, fueron una herramienta al servicio de los derechos y las libertades públicas. Fundamentales para el advenimiento de la II República. Miles y miles de socialistas dejaron su vida en el campo de batalla defendiendo la bandera tricolor…muchos miles terminaron en las cárceles del franquismo y el exilio.
No insulte usted con su verbo poco comedido ni a los socialistas actuales ni aquellos de los que muchos aún siguen tirados en cunetas olvidadas. Diferencie comportamientos y coyunturas de una dirección y unos dirigentes concretos, de una organización cargada de historia y servicio al Progreso y la Igualdad. Que no se dedicó a asaltar los cielos, pero si mejoró sustancialmente la calidad de vida en la tierra.
 
“Llaneza, muchacho, no te encumbres, que toda afectación es mala”, dice, en el Quijote, Maese Pedro a su ayudante.
 
 Antonio Campos Romay. Exdiputado en el Parlamento Gallego

3 comentarios:

el coquero1 dijo...

Digno de análisis,para ver el contexto de la repuesta de el sr iglesias

Juan Antonio Cortés Avellano dijo...

https://badajozylaguerraincivil.blogspot.com/2021/01/puigdemont-esta-exiliado-por-motivos.html?m=1

Salvador dijo...

Totalmente de acuerdo con su exposicion, en realidad es un indulto para todos los demócratas y más si somos republicanos. Demuestra estar anclado al comportamiento más negativo de los años 36 que lo hubo. Pro demuestra algo aun peor estando donde está, absoluta deslealtad a los compañeros de camino al tratarnos con tanta arrogancia y despreció, la soberbia es mala compañera de camino